Se tiene una idea falsa sobre el niño recién nacido al cual se le considera un ser vivo pero pasivo. En la actualidad este planteamiento está siendo superado por las nuevas interpretaciones de la psicología. Al contrarío el niño desde el primer instante es una estructura vincular innata y por tanto ni es un ser pasivo ni una tabula rasa. En este sentido las patologías pueden empezar a gestarse desde el minuto cero de su nacimiento e incluso antes de nacer.
El niño que se gesta en la mente de los padres antes de la concepción, el niño mental, es un etapa fundamental para la relación de los padres con el niño.