Buenos días a todos los amigos y seguidores del blog. Aquí en Valencia, en pleno Mediterráneo, estamos sufriendo temperaturas altísimas, cerca de los 40 grados. Siempre he sido una persona inquieta y aventurera, con un interés en cuestionar y profundizar en las verdades establecidas. Uno de los conceptos que más he investigado es el inconsciente, tal como lo presentó Freud en su teoría del psicoanálisis.
Freud hablaba del inconsciente pulsional, donde se reprimen los impulsos, principalmente sexuales y agresivos, especialmente los de la infancia. Estos impulsos reprimidos se almacenan en el inconsciente y tienden a retornar a la mente en forma de síntomas o comportamientos.
Sin embargo, a lo largo de mi experiencia y análisis personal, he llegado a la conclusión de que el verdadero inconsciente no es el pulsional freudiano. Para mí, el auténtico inconsciente es lo que llamo el «inconsciente del ser». Este inconsciente del ser no está compuesto por impulsos reprimidos, sino que es una parte integral de nuestra personalidad desde el principio. Es un yo profundo que busca expresarse y vincularse con el mundo y con los demás.
En mis análisis personales y clínicos, he descubierto que dentro de mí y de mis pacientes hay anhelos y deseos profundos de relación y plenitud. Este ser inconsciente busca crear un estado de unión y éxtasis, especialmente en las relaciones tempranas con figuras significativas como la madre y el padre. Cuando esta relación es saludable, se inicia una base sólida para una buena salud mental.
La modernidad ha propagado la idea de que nacemos como una «tábula rasa» y que la cultura moldea nuestra identidad. Pero mis investigaciones muestran que ya nacemos con un ser personal, una identidad que abarca lo físico, psíquico y espiritual como un todo indivisible.
Esta perspectiva del inconsciente del ser lleva a una psicología y psicoterapia diferente. En mi práctica, he observado que los pacientes traen a las sesiones no solo impulsos reprimidos, sino también ese ser profundo lleno de anhelos, deseos y potencial. Este enfoque más esencial y auténtico de nuestra realidad personal ofrece un camino más enriquecedor y pleno hacia la salud mental y el crecimiento personal.
Gracias por su atención. Espero que este video incite a un debate enriquecedor en los comentarios, buscando juntos la verdad.